martes, 24 de marzo de 2009

Travesía inversa Gato-Hundidero (Notas de Prensa)







Traigo aquí los recortes de periódico que en su día me envió Jorge Romo para documentar esta 1ª travesía en esta cavidad (a falta de que Pepe Sánchez nos envíe documentación sobre la que él realizó con Cristobal León, y que según afirma, fué anterior a ésta).






(Ver entrada con el nombre de "Travesía Gato-Hundidero: 15 enero de 1.975)

lunes, 2 de marzo de 2009

La Sima de Cacao (1.976)

(Topografía de la sima realizada por el Grupo GIEX)



Durante el Campamento de Espeleología realizado en Villaluenga del Rosario en 1.976, se realizó la exploración de esta sima, de la que se conocía su gran pozo de entrada en una vertical absoluta de -80 metros, que aún hoy día sigue siendo la mayor de la provincia de Cádiz.
Debido a su amplia boca, la luz penetra hasta el fondo del mismo, haciendo de su bajada una experiencia difícil de olvidar. Su boca se abre en la Sierra del Caíllo, y para llegar a ella se impone una fuerte subida desde el pueblo.


Componíamos la expedición:

Juan Antonio G. Mayorga
Toñi Martin
Mari-Angeles Garcia Vázquez
Loreto Wallace
Jose Maria Verdugo
Jose A. Berrocal
Las bajadas las realizábamos con descendedor, y las subidas con escalas. Bajamos todos, excepto Berrocal que se quedó en superficie para organizar la seguridad en la maniobra de subida.

(En la foto, preparándonos a la entrada de la Sima. )
Hoy día, con la técnica de la sola cuerda, este pozo se suele fraccionar para que sea más rápido el ascenso y descenso del mismo.

En la base del pozo existía una estrecha continuación que nosotros forzamos con la ayuda de una maza de escalada, accediendo a una zona seca , por la cual se alcanza la profundidad de – 122 metros.


Posteriormente, el GIEX en el año 1.984 descubrió una sala de gran belleza, a la cual denominó Sala GIEX, y a la que llegaron mediante un péndulo a -45 metros en el gran pozo de entrada. En ella se puede admirar una espectacular colada de 22 metros de altura, así como gours y nidos de pisolitas. Por esta zona se alcanza la cota más profunda de la cavidad: -139 metros.
Recuerdo que volvimos al pueblo, después de la exploración, ya entrada la noche. Tuvimos que alumbrarnos con nuestros carburos para encontrar el camino más fácil de bajada entre aquellos canchos. Parecíamos una procesión de ánimas.

Foto: Manolo Wallace.